Tras mucho esfuerzo consigues darle la forma que quieres a tu cabello, sales de casa y al momento el clima (la humedad, el viento, etc.) arruina todos tus esfuerzos. Basta con que haya un poco de humedad para que aflore lo peor de tu cabello… Bajo el efecto del viento y la humedad tu cabello se encrespa y se ve apagado. Afortunadamente, los productos capilares han sido especialmente formulados para dominar el cabello rebelde e imponerse a las tempestades, las tormentas y la humedad.
Son varios los factores responsables de un cabello rebelde. Por supuesto, tu cabello también puede serlo por naturaleza y resistirse a cualquier peinado. Pero en la mayoría de los casos, este problema es debido a lavados muy frecuentes, el calor del secador, las coloraciones o las permanentes onduladas. Todas estas acciones conllevan a una falta de brillo e hidratación, haciendo que el cabello esté seco, quebradizo y rugoso. Para empeorar aún más las cosas, el cabello a veces está cargado de iones negativos, ello provoca la electricidad estática que hace que el cabello se encrespe.
Cuando el cabello fino y desvitalizado está encrespado, no podemos utilizar acondicionadores que sean ricos en lípidos y lo apelmacen. Este tipo de cabello necesita proteínas. El cabello pierde esta sustancias cada vez que lo lavamos por eso necesita que se la devolvamos. Hay productos capaces de reponer esta proteína y restablecer la estructura interna del cabello fortaleciéndolo.
Los champús, acondicionadores, tratamientos sin aclarado y mascarillas contienen ingredientes hidratantes. Si hacemos un uso regular de estos productos podemos conseguir un cabello liso muy saludable y con un brillo asombroso. Los climas húmedos y las días de lluvia no suponen ningún problema a un cabello que está suficientemente hidratado.
El cabello frágil y quebradizo suele tener las puntas abiertas, padece el encrespamiento, está rugoso y se ve apagado. La cutícula capilar envuelve el cabello con una capa lisa pero cuando está dañada deja de reflejar la luz y el cabello se ve apagado. Los productos de cuidado con proteínas de seda, soja o trigo fortalecen la estructura del cabello debilitada y lo cubren con una fina capa protectora hasta el próximo lavado. ¿El resultado? El cabello se ve más brillante, sano y ligero. Otros ingredientes activos como la coenzima Q10 pueden reparar el cabello quebradizo y favorecen la formación de keratina, el componente principal del cabello. Ingredientes activos como la sílice de bambú o las raíces de Ginseng fortalecen el cabello más desvitalizado. Los productos que contienen un complejo de polímeros iónicos neutralizan la electricidad estática del cabello más difícil de peinar. El complejo de polímeros iónicos restaura la suavidad de la cutícula capilar y repara la estructura capilar desde el interior.
El cabello grueso y rebelde, además de necesitar los ingredientes que realzan su estructura capilar, necesita lípidos. Los productos de cuidado enriquecidos con preciados aceites vegetales proporcionan al cabello los ácidos grasos insaturados que necesita. Puedes escoger entre los aceites vegetales más ligeros: Marula, almendras, sésamo o de nuez de albaricoque; o más ricos: Amaranto, Argán o aceite de oliva. Estos últimos son más recomendables para el cabello grueso ondulado. Muchos de los aceites mencionados no necesitan aclarado aunque algunos otros están incorporados en champús y acondicionadores que necesitan aclarado.
Gama Nutrición Total de Gliss
Gama Liso Asiático de Gliss
Gliss Oil Elixir Diario (aceite capilar)
Tratamiento de Brillo de Gliss Ultimate Repair